domingo, noviembre 14, 2010
Voluntades y Procesos en las Crisis Economicas que vemos por la ventana
Nunca vimos tanta esquizofrenia junta... pero como el mundo es esencialmente esquizo pasamos por alto algunas viejas novedades nuevas que no deberíamos menospreciar.
Estoy hablando de eso que oímos hablar acerca de una "crisis económica mundial". Pareciera, a primea vista, el panorama es serio. Nos hablan de la "peor crisis desde 1930", momento de eclosión del antiguo sistema global financiero y económico liberal que dejó a EE.UU. en la ruina económica y política por un tiempo. Este dato no es menor porque tambien incorpora la anécdota fundamental de la crisis en el país del norte. Los diagnósticos vienen en grafos alfabéticos: crisis en V, W, U, y alguna otra letra que estaré olvidando. Los puntos mas bajos son los puntos de la caida, el ascenso puede ser rapido, rapido y nuevamente invitando a la caída, o de una caída que se expresa en un estancamiento prologando hasta que nuevamente agarramos la onda ascendente.
Todos estos panoramas intentan darle una narrativa tranquilizadora a la incertidumbre que se vive en los ámbitos de decisiones de las elites económicas y políticas del mundo. Los grafos son las trayectorias de una hipotética vuelta a un orden original luego de algunos sustos. Y como todo relato, está hecho para que algunos actores tengan un eje vector desde donde actuar, tanto para enrolar actores y hechos para legitimarlo como para tener un escenario referencial desde el cual actuar. Un pragmatismo standard, nada nuevo digamos.
En el medio del nudo gordiano, el dólar como moneda agitando aguas, como siempre, pero con oscilaciones que consisteen en procesos que gradualmente desmembran en intereses distintos y opuestos a los actores que consensuaban tradicionalmente esta torta mundial.
En bruto, la economía estadounidense esta en caída. No tan pronunciada como para salir corriendo a la luna y pedir residencia o asilo, pero si lo suficiente como para que las aguas se dividan y dejen vacíos de sentido importantes. Nadie hubiera querido esto. Todos se lamentan y se preguntan como pudo haber sido, mientras que simultaneamente acomodan sus apuestas, opiniones e intereses.
En el 2008 la apuesta fue clara. Hay que sostener esto sea como sea. Inyectamos dinero en la economía, rescatamos a todos los sapos caídos (bancos, aseguradoras, bonos del Estado, etc.) y esperamos a que la cosecha mas temprano que tarde rinda... Pero no funcionó. El desempleo? Bien, gracias. "Pregúntele a las fuerzas del mercado". Y sin embargo, la economía norteamercana esta en un lodazal. La gente no consume tanto, y ya no quiere/puede endeudarse como en "los viejos buenos tiempos". Los bancos siguen funcionando luego de ser rescatados, pero no prestan dinero y sospechan de todos sus similares. El capitalismo, podría decirse, perdió su "humanidad acotada".
A todo esto, los rescates dejaron sumidos a los Estados en deudas a la sudamericana tercermundista. Y aquellos bancos y entidades financieras que dispararon la crisis, ahora se transforman -como el libreto dice - en jueces de las finanzas de los Estados, complicadisimos con toda la tarasca que tuvieron que poner ("por el bien de la humanidad y de las naciones libres") para rescatar a los mismo bancos que hoy ejercen el papel de verdugos (que tambien tienen la soga al cuello, pero no la muestran).
Mientras que en el orden geopolítico, las elites dirigentes intentan remendar las cosas modificando los ingredientes del menú. Ingredientes no menores, por cierto. Mayores cuotas en organismos internacionales para los países emergentes que ahora se asoman como la esperanza de un nuevo mundo. Los BRIC (Brasil, Rusia, India, China). Que, oh casualidad, son los mayores tenedores de bonos del tesoro norteamericano (junto con Japon). O sea, los que aportan las finanzas para que EE.UU. pueda seguir intentandolo. En este toma y daca cada uno, como mayores o menores beneficios, tenía un lugar estable, relativamente confortable en el reparto del libre comercio mundial. La contundente crisis norteamericana deja a todos mirandose los unos a los otros, con ganas de salir del casino con la cantidad intacta que tenían cuando se cortó la luz (dígase "el credito", la money, el cash).
Este último G-20, cumbre de los 20 países mas importantes del mundo, según alguna determinación de última hora (G-20 o G-192 -cantidad de paísen en la ONU- menos 172).
Es que dos años despues de la primer ronda de dinero facil (la impresion/inyección de papel dólar por parte de la Reserva Federal de EE.UU.), y sin resultados importantes a la vista, ahora los estadounidenses piden pista nuevamente a los hermanos menores. O sea, piden varias cosas a la vez. Dolar mas barato ("chicos, no compliquen la entrada de dolares a su economía, tanta oferta de dolares abarata su valor y beneficia nuestras exportaciones... que perjudica a mediano plazo su economía desindutrializandola y, por ende, generandoles desempleo.. y bueno... solo un momento, por favor... cuantas veces hicimos esto y salió bien. Confíen en nosotros. No hay escapatoria para nuestro exito. "Que EE.UU. salga de la crisis beneficia al mundo". )
Sea un pedido o una presión, las cosas están difíciles. En el medio, un torbellino de oscuros presagios se asoman para los templadez europea y la soberbia norteamericana y, en menor medida, la nueva superpotencia china. La crisis política. La economía, tan naturalizada en estadisticas, jerga tecnica y modelos codificados, juega ahora el papel comodín de tiempo para sortear lo que parece cada vez más un big bang de intereses diversos listos para desarrollar sus nuevos caminos.
Quizás haya sido Immanuel Wallerstein el que le dío una formula eficaz a los principales procesos puestos en marcha por la descarrilada economía mundial:
" Yo considero que el asunto subyacente es más simple que las enredadas explicaciones de la mayoría de los analistas de política. Comienzo con unos cuantos supuestos. El estatus del dólar como divisa de reserva del sistema-mundo es la última ventaja importante con que cuenta Estados Unidos en el sistema-mundo de hoy. Es por tanto entendible que Estados Unidos hará lo que pueda para mantener esta ventaja. Para hacer eso requiere de la voluntad de otros países (incluidos, notablemente, ésos del noreste de Asia -AUNQUE TAMBIEN BRASIL) no sólo para que usen el dólar como modo de calcular las transferencias sino como algo en lo cual invertir sus excedentes (particularmente en bonos del Tesoro estadunidense).
No obstante, la tasa de cambio del dólar ha ido deslizándose constantemente. Esto significa que tales excedentes invertidos en bonos del tesoro valen menos conforme pasa el tiempo. Llega un punto en que las ventajas de tal inversión (siendo la principal ventaja el sostener la capacidad de las empresas estadunidenses y los consumidores individuales para pagar por sus importaciones) serán menores que la pérdida del valor real de las inversiones en bonos del Tesoro. Ambas curvas se mueven en direcciones opuestas.
El problema es uno que está presente en cualquier situación de mercado. Si el valor de unas acciones está cayendo, los dueños querrán deshacerse de ellas antes de que caigan muy bajo. Pero si un accionista grande se deshace de ellas muy rápido, esto puede impeler a que otros corran a vender, lo que ocasiona pérdidas aún mayores. El juego es siempre encontrar un momento elusivo para deshacerse de las acciones, uno que no sea ni demasiado tarde ni demasiado pronto, ni demasiado lento, ni demasiado aprisa. Esto requiere un sentido perfecto del tiempo, y la busca de esta sincronía perfecta es el tipo de juicio que con frecuencia se tuerce.
Esto es lo que veo como retrato básico de lo que está ocurriendo y ocurrirá con el dólar estadunidense. No puede continuar manteniendo el grado de confianza mundial de que alguna vez gozó. Tarde o temprano, la realidad económica se le empatará. Esto puede ocurrir en una conmoción de cinco minutos o en un proceso mucho más lento. Pero cuando ocurra, la pregunta clave es ¿qué pasará entonces?"
"Che, men, y Argentina? Todo bien, no?"
AMEN..
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